Comunicado: Cierre de la primera etapa de la Primera Brigada Nacional de búsqueda de familiares de personas desaparecidas de la Red de Enlaces

Buscándolos Nos Encontramos

Ciudad de México, 22 de Abril de 2016
El pasado 9 de abril inició la Primera Brigada nacional de búsqueda de familiares de personas desaparecidas de la Red de Enlaces, integrada por buscadores solidarios de Guerrero, Coahuila, Sinaloa, Chihuahua, Morelos y Baja California. Acudiendo al llamado de las familias de Veracruz, efectuamos localización y búsqueda de fosas en diversos puntos, escuchamos diferentes casos y compartimos experiencias con familiares de personas desaparecidas en tal entidad, con miras a la consolidación de grupos de búsqueda locales permanentes. Asimismo, compartimos preocupaciones y temas urgentes de atender con diferentes grupos de víctimas, acompañantes y personas solidarias, comenzando a perfilar una agenda ciudadana que responda a la indolencia e incapacidad estatal.
A su paso por distintos puntos, la Brigada encontró un estado fracturado, lastimado por la incapacidad y falta de voluntad por parte del gobierno para esclarecer las desapariciones, localizar a las personas desaparecidas y perseguir y sancionar las graves violaciones a los derechos humanos que se cometen todos los días. Corroboramos lo que ya sabíamos, esta situación ha generado desconfianza y temor de la sociedad veracruzana para interponer denuncias, aportar información en las indagatorias, o exigir avances en los aún incuantificables casos existentes. Hemos podido constatar la falsedad de la estadística oficial y la impunidad que prevalece en prácticamente todos los casos denunciados, tanto a nivel federal como estatal, así como la emergencia humanitaria que el estado de Veracruz y todo el país atraviesan.
Bastaron algunas horas para recibir información sobre diferentes fosas clandestinas y para que familias de diferentes puntos de la entidad, e incluso de otras, acudieran a la Brigada para narrar sus casos y pedir ayuda, dado que se respira miedo, impotencia e incertidumbre. Las familias no han recibido respuesta alguna por parte de las autoridades obligadas a investigar los hechos, y la deficiencia en la ejecución de diligencias fundamentales en casos de desaparición es evidente, así como el gran temor frente al clima de violencia existente en varios puntos de la entidad.
Ante tal escenario, desde el inicio, la Brigada solicitó condiciones y mecanismos de seguridad para llevar a cabo las labores de búsqueda y para salvaguardar a las familias que durante este tiempo permanecieron en la Iglesia de los Santos Reyes en el Municipio de Amatlán de los Reyes, así como apoyo de equipos de investigación, sin encontrar respuesta oportuna, coordinada y efectiva de parte diferentes instancias involucradas. Aun así, se iniciaron los trabajos, teniendo resultados rápidos, que demuestran que basta tener voluntad para encontrar fosas, información relevante y víctimas abandonadas por las autoridades.
Durante nuestra estancia en esta localidad de Veracruz pudimos conocer y documentar cerca de 40 casos de familiares de personas desaparecidas que por miedo u omisión de las autoridades no habían tenido la oportunidad de recibir asesoría, presionar o avanzar en sus investigaciones o, en algunos casos, incluso, interponer la denuncia de tales hechos. Frente a esta situación, la Brigada nacional impulsó un mensaje y una acción humanitaria que permitió que muchas familias rompieran el silencio y el miedo y se fortalecieran los vínculos con los colectivos de víctimas y organizaciones de la región.
Además, se consolidó un esquema de búsqueda nacional al conjuntar las experiencias y saberes que los familiares de los diferentes colectivos han ido consolidando en el largo caminar por la búsqueda de sus seres queridos. Asimismo, se construyó un sistema de trabajo y colaboración con los colectivos de familiares, las organizaciones locales y nacionales, y con las personas que se solidarizaron con la causa de la Brigada.
La Brigada nacional después de 15 días de labores y trabajo de búsqueda en diferentes lugares del estado referido, localizó cerca de 15 puntos con restos humanos, muchos de ellos calcinados, que esperan ser identificados para ser devueltos a sus familias de manera digna.
Los colectivos y organizaciones que integran la Brigada nacional exigimos una pronta respuesta ante tales hallazgos, demandamos se esclarezca la identidad de los restos y se informe pública, sensible y oportunamente a las familias del estado de Veracruz sobre los resultados que de los trabajos periciales se obtenga. Enfatizamos la necesidad de establecer mecanismos coordinados y eficaces de localización e identificación de personas desaparecidas, pues la desatención de este tema ha alcanzado niveles críticos.
Agradecemos a todas las personas que se solidarizaron con la Brigada, a las organizaciones observadoras y equipo de apoyo y a todos aquellos que han escuchado nuestro llamado y han asumido un compromiso de no callar más y continuar impulsando una agenda en torno a la Verdad. Agradecemos también a los periodistas que dieron cobertura puntual de las actividades de la Brigada.
Finalmente, agradecemos de manera muy especial al Obispo de la diócesis de Córdoba, Eduardo Patiño Leal y al Párroco de Amatlán de los Reyes, Julián Verónica, por su recibimiento y acompañamiento, por abrir las puertas de la Iglesia a nuestro dolor y por darnos oportunidad de difundir nuestra palabra en sus comunidades, donde encontramos esperanza, por eso agradecemos por su compromiso con la paz, la verdad y la justicia.
En este pequeño inicio de la Brigada Nacional de Búsqueda encontramos restos de algunos de nuestros hermanos, hermanas, hijos o hijas, padres o madres, pero también encontramos esperanza en los ojos de muchas personas que se acercaron a nosotros, que nos han devuelto fuerzas para seguir buscando. Buscándolos nos encontramos.
Hacemos un llamado a la sociedad mexicana e internacional a voltear a ver la tragedia que hoy nos llama urgentemente en Veracruz y en cientos de puntos del país, a exigir se atienda con la seriedad debida la desaparición de personas. Asimismo, hacemos un llamado a todas las familias a sumarse a las acciones de búsqueda y a las actividades que estaremos convocando próximamente, a unirse en este esfuerzo, que como se demostró, presenta resultados que no encontraremos nunca en un escritorio de cualquier indolente oficina gubernamental.
Atentamente,
Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas
 

familiares en busquedaFoto: Germán Canseco

 

Primer Comunicado al inicio de la Brigada Nacional de Búsqueda

Buscaándolos Nos Encontramos

Veracruz, México, abril de 2016
Somos buscadores de Guerrero, Coahuila, Sinaloa, Chihuahua y Baja California, que hemos decidido atender el llamado de las familias de Veracruz. Eso somos, personas que buscamos a nuestros familiares y que hemos desenterrado a muchas personas, que hemos desarrollado las mejores habilidades de localización del país y que hemos dado algo de paz a muchas familias, entregando a sus seres queridos.
El estado de Veracruz ha puesto nuevamente al descubierto la emergencia humanitaria de dimensiones aún incuantificables que atraviesa México. Se tiene conocimiento de un número alarmante de personas desaparecidas y ejecutadas extrajudicialmente en tal entidad. Prácticamente en la totalidad de los casos prevalece la impunidad.
El próximo 9 de abril de 2016 iniciaremos la Primera Brigada nacional de búsqueda de familiares de personas desaparecidas de la Red de Enlaces, integrada por buscadores solidarios de las diferentes entidades señaladas, que formaremos y acompañaremos grupos de búsqueda locales en Veracruz. Esta brigada será, además, acompañada por organizaciones de la sociedad civil, un equipo de documentación, medios de comunicación y personas solidarias.
La Brigada partirá de la Ciudad de México el día 9 de abril de 2016 y llegará a Amatlán de los Reyes, Veracruz. Estará por el tiempo que sea necesario instalada en la Iglesia de los Santos Reyes, gracias a la colaboración solidaria de la Iglesia. En este punto se verificará la información que se tiene sobre puntos de búsqueda y una vez que se cuente con un diagnóstico y un plan verificado por los diferentes equipos, se iniciarán las búsquedas en campo.
Sabemos que hay personas de la sociedad que cuentan con información sobre el paradero de muchas personas desaparecidas o ejecutadas, que podrían ser nuestros familiares, que no entregan por temor o desconfianza hacia las autoridades. Hoy hacemos un llamado a la sociedad a que rompa su silencio y su indiferencia y a que se solidaricen, nosotros no develaremos la identidad de nadie. Solo queremos saber dónde están nuestros familiares, encontrarlos y sepultarlos dignamente, queremos saber que no pasan frío o hambre, que no están malheridos o sufriendo.
Ante el riesgo que la búsqueda tropiece con agresiones, amenazas y obstaculizaciones, por los riesgos en las zonas de las constantes agresiones a familias y colectivos, consideramos de primera importancia la colaboración y respuesta diligente de las diferentes autoridades involucradas. Por tanto, hacemos un llamado al gobierno federal, al de Veracruz, a la Procuraduría General de la República, a la Fiscalía General del Estado de Veracruz, a las Comisiones Nacional y Estatal de Derechos Humanos, para que en el marco de sus respectivas competencias y esquemas de colaboración: garanticen la seguridad de las personas integrantes de la Brigada, tanto en la Iglesia donde se establecerá el sitio de trabajo, como en las búsquedas y a que establezcan mecanismos y medidas pertinentes para que, en caso de que existan hallazgos positivos, se resguarden los mismos, se evite el deterioro de los restos encontrados, la destrucción de evidencia y se proceda al diligente procesamiento de los lugares y restos y a la entrega de información de acuerdo con las disposiciones y protocolos existentes en la materia. También pedimos a los organismos internacionales, organizaciones y personas solidarias a que estén atentos de estas acciones.

Además, instamos a las autoridades para que se evite criminalizar y obstaculizar esta labor y se enfatiza que no se tiene la intención de hacer justicia por mano propia, de acusar o señalar personas, ni de obstaculizar investigación alguna.
En especial, solicitamos se establezcan todas las medidas o mecanismos tendientes a:

  1. Garantizar la seguridad de las personas participantes de acuerdo al riesgo de la zona, mismas que deberán ser consultadas con las familias y el equipo de acompañamiento jurídico.
  2. Dado el alto índice de desapariciones atribuidas a las policías estatales y municipales de Veracruz, las medidas de protección deben ser ofrecidas por Policía Federal.
  3. El establecimiento de esquemas adecuados, participativos y eficaces en materia de cadena de custodia, registro fotograáfico, resguardo y procesamiento de los posibles hallazgos, así como de identificación de personas.
  4. La formalización de un mecanismo interinstitucional e interdisciplinario de colaboración entre las autoridades federales y estatales competentes, que debiera incluir la designación de agentes de investigación y equipo pericial suficiente y capacitado, tanto federal como estatal y en que deben participar expertos independientes y evidentemente las familias.

Atentamente,
Primera Brigada Nacional de Búsqueda de familiares de personas desaparecidas de la Red de Enlaces:

  • –  Red de Enlaces Nacionales, Nacional
  • –  Asociación Unidos por los Desaparecidos, Baja California
  • –  Colectivo de familias de desaparecidos Orizaba-Córdoba, Veracruz
  • –  Grupo Vida , Coahuila
  • –  Justicia para Nuestras Hijas, Chihuahua
  • –  Los Otros Desaparecidos, Guerrero
  • –  Voces Unidas por la Vida-Sabuesos, Sinaloa
  • Observadores:Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro-Juárez, A.C.
    Comisión Episcopal para la Pastoral Social: dimensión de Justicia, Paz y Reconciliación IDHEAS, Litigio Estratégico en Derechos Humanos, A.C.
    Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia A.C.
    Pastoral Social de la Provincia Eclesiástica de Xalapa, Veracruz
    Red Retoño.